Ackdos Gil. A primera vista parece un villano de actitud amenazante, con cierta clase y estilo. Que sabe como adoptar una pose que diga: “Soy el líder de los villanos. Tengo poder, y siento un inmenso fastidio al ver que un planetucho de tercera se me resiste”. Algo que varios villanos han logrado en el pasado. Pero Ackdos Gil tiene algo que no tienen villanos anteriores.
Perseverancia.
La invasión a la que acaban enfrentados los Gokaiger es la segunda invasión del imperio Zangyack. Y para detenerla la primera vez hizo falta el poder combinado de los treinta y cuatro primeros Súper Sentai. De todos.
Es decir, Ackdos Gil no acepta la derrota, no acepta que un planeta se resista a ser conquistado, arrasado y/o anexionado por sus tropas. La segunda vez envía a su propio hijo como líder de la flota invasora, pero cuan-do este muere en combate contra los héroes, acude en persona al frente. Y es entonces cuando la cosa se pone seria de verdad.
Es un líder cruel, tiránico, déspota, y con mal perder. Pero acaba como acaba.
Y así, llegamos al final de la que, personalmente, la mejor serie de aniversario jamás vista. Se han- hecho las cosas como se debía, usando a actores originales cuando era posible, referenciando las series anteriores, llevando a cabo tributos y homenajes de las más recordadas o populares (cargado de acción sin freno el dedicado a Dekaranger, especialmente emotivo el dedicado a Timeranger). Y en fin-, haciendo que los fans hayamos disfrutado como nunca.
No se que deparará el futuro a los Súper Sentai. Pero sin duda, este último año ha sido para recordar.
¡Nos leemos!
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